Los tiempos cambian y esto de la nueva normalidad ya no es tan nuevo. Los medios de comunicación y formas de trabajar han ido cambiando, y aunque no es la primera vez que evoluciona, sí que ha revolucionado la manera de trabajar de muchas personas, como en la fotografía.

Iniciemos recordando que la fotografía ha sido revolucionaria desde que se originó en el siglo XIX. Causó ruido entre todos cuando la intentaban poner a competir contra la pintura. Si bien tienen características muy similares, creo que en la actualidad ambas evolucionaron en rumbos diferentes.
Pero más allá de los tecnicismos de ambas, me gustaría enfatizar en la evolución de la manera en que la fotografía tuvo que adaptarse en tiempos de cuarentena. Gracias al COVID19 pudimos descubrir que no se necesita todo un set para poder crear fotografías interesantes y de muy buena calidad. Tampoco necesitamos la cámara profesional más costosa del mercado.
Afortunadamente, los teléfonos actuales nos pueden ayudar como un gran recurso, pues si bien las cámaras de algunos móviles ya comienzan a generar competencia contra las cámaras réflex, muchos otros piensan que no generan la misma calidad fotográfica que los primeros mencionados.
Y de los medios digitales que más han sacado provecho de estos recursos y trabajando a pesar de la larga distancia, han sido las fotografías las que han tomado la delantera.
Por ejemplo, la portada de junio de Rolling Stone se trata de Bad Bunny, el músico puertorriqueño. En la revista las fotografías que utilizan tanto para portada como para vestir la nota del artista, fueron tomadas con un iPhone por Gabriela Berlingeri, su novia.
Otro claro ejemplo de diversas formas de crear buenas fotografías y que los medios han tenido que adaptarse a la contingencia, es la edición de junio de Vogue Czechozlovakia. Una sesión de fotografías que retratan a Kylie Jenner y a su hija Stormi Webster posando vía Zoom. Dicha sesión de fotos fue realizada por los hermanos Luca y Alessandro Morelli, quienes también compartieron su trabajo en Instagram.
En conclusión, la fotografía ha sido un claro ejemplo de cambio en esta vida durante y post pandemia. Nos ha demostrado que los recursos nunca son un pretexto y que cada día podemos crear cosas interesantes adaptándonos a las circunstancias.





